En Granada hay más de 12.000 viviendas vacías mientras más de 300 personas malviven en la calle. Esta contradicción inasumible, alimentada por políticas inhumanas y la dejadez institucional, vuelve a denunciarse públicamente este viernes 25 de abril en la Plaza del Carmen, coincidiendo con la entrada al Pleno del Ayuntamiento.
Desde el Colegio Oficial de Trabajo Social de Granada respaldamos la movilización convocada por el colectivo La Calle Mata, en la que se exige el fin de las llamadas “limpiezas” en las que se tiran pertenencias personales de las personas sin hogar (mantas, ropa, colchones, recuerdos…), así como la habilitación urgente de refugios climáticos diurnos que protejan a estas personas de las altas temperaturas del verano. Lo que reclaman no es un privilegio: es un derecho humano básico.
La exclusión residencial no es fruto del azar, sino de decisiones políticas que abandonan a quienes más apoyo institucional necesitan. En lugar de protegerlas, el Ayuntamiento opta por criminalizar la pobreza, ignorando las recomendaciones profesionales, vulnerando derechos y agravando el sufrimiento de personas ya expuestas a la precariedad más extrema.
Frente a esto, las trabajadoras sociales tenemos claro que no se puede hablar de ciudadanía plena ni de justicia social mientras haya personas viviendo en la calle. Hacemos un llamamiento a la sociedad granadina para que apoye esta reivindicación justa y urgente: el derecho a una vida digna no puede depender de la especulación ni del clima.
Desde el Colegio nos sumamos a las voces que exigen una política de vivienda centrada en las personas, no en los intereses económicos. Porque las vidas en la calle importan. Porque la dignidad no se barre.
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